Refinancia deuda, agrupa acciones, sube su cotización y los socios minoritarios piden entrar en el consejo.
José Justo
Ver para creer. Hace mes y medio publicamos nuestro paroxismo por la mortecina vida bursátil de las acciones de Grupo Dia, que han estado en coma profundo durante tres largos años, a pesar de que el panorama ejecutivo y la reestructuración de la empresa estaba despuntando significativamente.
Pues bien, el cadáver ha empezado a resucitar. Por lo menos, da muestras de intentarlo. Recientemente, la empresa ha comunicado que ha conseguido un acuerdo con un grupo de bancos europeos para refinanciar su deuda por valor de 885 millones de euros, un año antes de su vencimiento y sin necesidad de recurrir a su principal accionista, el Grupo LetterOne.
En paralelo, anuncia que propondrá en la próxima Junta General de Accionistas, que celebrará este mismo mes de diciembre, una agrupación de acciones. Este Contra Split eleva su valor nominal unitario de 0,01 euros a 10,00 euros, para impulsar su liquidez y trasladar valor a estas acciones. Todo ello fundamentado en los buenos resultados del Grupo, que ya está saliendo de una fuerte y costosa reestructuración en la que lleva cuatro años.
Horas después de este anuncio, la cotización de las acciones del Grupo Dia en el parqué empezaba a despuntar. Después de tres años en un marasmo agónico de un inamovible 0,013 euros.
Les queda mucho camino por recorrer si atendemos que las cuatro firmas bursátiles que cubren el valor, desde hace ya tiempo, le asignaron un potencial de crecimiento de al menos un 45 % y Capital Markets le otorgó un precio objetivo de 0,032 euros por título, lo que entonces representaba un 160% de revalorización.
Con todo, lo más relevante de este caso es la profunda reestructuración empresarial pilotada por el CEO actual del Grupo Dia, Martín Tolcachir, que ha puesto el foco en el negocio nuclear en España, que representa el quinto conglomerado más importante de distribución comercial. Está lejos de Mercadona, pero no tanto de sus otros competidores inmediatos. Ahora mismo vive una fuerte dinámica de modernización y los análisis de los expertos independientes corroboran que está ganando cuota de mercado.
Desde el 2019, después de muchas turbulencias, el Grupo Dia pertenece al oligarca ruso Mikhail Fridman y a otros socios que controlan el 77% de la compañía, a través del fondo LetterOne asentado en Luxemburgo.
La resurrección bursátil de Supermercados Dia no ha pasado desapercibida para un grupo importante de accionistas minoritarios, agrupados en una coalición bajo la bandera de Western Gate que es la división de inversiones de la ‘family office’ de Luis Amaral, propietaria de un 2,18 de acciones de Dia.
Este grupo de accionistas que ya se había pronunciado en anteriores ocasiones, como voz en el desierto, reconoce ahora ciertos avances operativos en la compañía. Al tiempo que demandan una recomposición profunda del actual Consejo de Administración, argumentan que sólo dos de sus integrantes tienen experiencia en el sector y solicitan también un asiento en este órgano de gobierno, para reforzar su independencia y profesionalidad.