Omnicom absorbe Interpublic, valorado en 12.500 millones de euros, y unirá a dos gigantes del marketing y la publicidad.
Ángel Zamarriego
El grupo estadounidense Omnicom ha anunciado la adquisición de Interpublic, en una operación valorada en 12.500 millones de euros, que consolidará a la empresa resultante como la mayor compañía de marketing y publicidad a nivel mundial. Con ingresos combinados estimados en 24.223 millones de euros, Omnicom superará a competidores como la británica WPP y la francesa Publicis.
Según los términos del acuerdo, los accionistas de Interpublic recibirán 0,344 acciones de Omnicom por cada acción que posean. Tras la fusión, los accionistas de Omnicom controlarán el 60,6% de la nueva empresa, mientras que los de Interpublic poseerán el 39,4% restante.
John Wren continuará como presidente y consejero delegado de Omnicom, y Phil Angelastro mantendrá su posición como director financiero. Philippe Krakowsky, actual CEO de Interpublic, y Daryl Simm, jefe de operaciones de Omnicom, serán copresidentes y directores de operaciones de la entidad fusionada.
La empresa combinada conservará el nombre de Omnicom y seguirá cotizando en la Bolsa de Nueva York bajo el símbolo OMC. Se espera que esta fusión genere sinergias de costes anuales valoradas en 710 millones de euros, además de impulsar las ganancias ajustadas por acción para los accionistas de ambas empresas.
El anuncio ha generado movimientos en los mercados financieros. Mientras las acciones de Omnicom cayeron un 8% tras la noticia, los títulos de Interpublic subieron un 7%. Pese a estos ajustes, ambas compañías anticipan beneficios estratégicos a largo plazo, incluyendo una mayor capacidad de innovación y adaptación tecnológica.
“A través de esta combinación, estamos preparados para acelerar la innovación y aprovechar las oportunidades creadas por las nuevas tecnologías en esta era de cambio exponencial”, afirmó John Wren, presidente y CEO de Omnicom.
Por su parte, Philippe Krakowsky destacó que la fusión ofrece “una tremenda oportunidad estratégica” para los accionistas, subrayando la complementariedad en la oferta de servicios, presencia geográfica y cultura de ambas empresas.
La operación, sujeta a la aprobación de los accionistas y reguladores, está diseñada como una transacción libre de impuestos y se prevé que se complete en la segunda mitad de 2025.
